Receta para 5 personas.
Tiempo: 1:15h
Canelones… ¡Qué ricos están! Nos encantan los canelones tradicionales de la abuela, pero nos encanta también probar nuevos sabores. Esta receta de canelones destaca no solo por su exquisito sabor sino también por su suavidad y ligereza. El toque suave dulce, por la leche de avena, de la bechamel junto con el salado del pollo, ¡no te dejara indiferente!
Para esta receta recomendamos usar la bandeja de horno KUOKO funciona de maravilla y su baja altura facilita el poder servir los canelones sin que se rompan.
INGREDIENTES
Para 20 canelones
- 20 placas de canelón
- 4 o 5 dientes de ajo
- 300 gr. de pechuga de pollo
- 300 gr. de espinacas frescas
- 150 gr. de queso rallado
- Sal, pimienta y aceite de oliva
PARA LA BECHAMEL
- 3/4 de litro de leche de avena
- 40 gr. de harina de avena (2 cucharadas)
- 30 gr. de mantequilla
- Sal, pimienta negra y nuez moscada molida
PREPARACIÓN
- Iniciamos picando los ajos y los ponemos en la cacerola de cerámica grande (29,5cm), previamente calentada, con un poco de aceite.
- En cuando empiezan a dorarse añadimos y cocinamos las pechugas de pollo fileteadas, y cortadas a trozos, con un poco de sal y pimienta.
- Añadimos las espinacas y removemos durante 2 minutos. Tapamos la cacerola para que el calor no se vaya, apagamos el fuego, y dejamos reposar todo durante 4 minutos más mientras se ablandan las espinacas. La cerámica retendrá el calor sin necesidad de mantener la placa de cocina encendida.
- Mientras esperamos a que la masa se enfríe para poder triturar. Empezamos con la bechamel.
- Para preparar la bechamel, calentamos una cacerola pequeña (20cm) o mediana (25cm).
- Añadimos la mantequilla, dejamos que se funda toda, y añadimos la harina, poco a poco, hasta que coja un color dorado y vaya formando una pasta.
- Una vez tenemos todo bien mezclando, cogemos un batidor para evitar que se nos hagan grumos y vamos añadiendo la leche de forma gradual y, importante, sin dejar de remover, haciendo círculos o movimientos en forma de 8. Es importante que la leche se vaya añadiendo de forma gradual, añadiendo a medida que vemos que la leche que ya hemos añadido se ha evaporado, y a temperatura ambiente o, idealmente, ligeramente calentada, para evitar cambios de temperatura.
- Una vez hayas agregado toda la leche, pruébala, añádele sal y ese toque tan característico de nuez moscada. Si la quieres más espesa o más ligera, juega con la cantidad de leche o cocínala durante más tiempo para evaporar la leche.
- Cuando ya tenemos la bechamel, colocamos la masa, previamente triturada en un bol. Le añadimos 2 o 3 cucharadas de bechamel (esto hará la masa de los canelones super ligera) y removemos de nuevo hasta obtener una masa homogénea.
- Hervimos o remojamos la pasta de los canelones según las instrucciones recomendadas por el fabricante.
- Rellenamos las placas con la masa, los enrollamos y los vamos poniendo una a una en la bandeja de horno KUOKO previamente engrasada con un poco de mantequilla o aceite.
- Cubrimos los canelones con el resto de la bechamel, espolvoreamos por encima el queso rallado y ya los tenemos listos para gratinar.
- Lo metemos en el horno precalentado a 180ºC para gratinar el queso durante unos 15 minutos o hasta que veamos una capa doradita.
- Dejamos reposar unos minutos antes de servir ¡y listo!
