La fibra es un componente esencial en la alimentación de las personas, aunque parece haber quedado olvidada en los últimos años, a la sombra de las proteínas y los minerales, que han cogido todo el protagonismo. Sin embargo, su importancia no puede ser subestimada y es necesario volver a recalcar su valor.
Por eso, en este artículo de Kuoko vamos a contaros los beneficios de la fibra en el cuerpo y su importancia en la digestión, para que nadie vuelva a olvidar incluir alimentos ricos en fibra en su alimentación.
¿Qué es la fibra?
La fibra es un componente que se encuentra en alimentos de origen vegetal como frutas, verduras, granos enteros, nueces y legumbres. A diferencia de otros componentes de los alimentos, la fibra no se digiere en el cuerpo humano. En cambio, pasa a través del sistema digestivo relativamente intacta, aportando una serie de beneficios para la salud.
¿Por qué es importante la fibra en el cuerpo?
La fibra desempeña un papel crucial en la salud digestiva. Al añadir volumen a las heces, ayuda a prevenir el estreñimiento y mejora la regularidad intestinal. Además, la fibra contribuye a mantener niveles saludables de azúcar en sangre, reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y controlar el peso corporal.
No obstante, además de facilitar la digestión, la fibra también tiene la capacidad de actuar como un “limpiador” natural del sistema digestivo, eliminando toxinas y desechos. Por eso, cuando alguien sufre intestinalmente se le recomienda comer alimentos para el estreñimiento ricos en fibra.
¿Cuánta fibra es necesaria en nuestro organismo?
La cantidad diaria recomendada de fibra varía según la edad, el género y el nivel de actividad física. Sin embargo, en general, los adultos deben consumir como mínimo unos 25 o 30 gramos de fibra al día para poder mantener una salud óptima.
Mejores alimentos para el estreñimiento
Como ya hemos comentado, los alimentos ricos en fibra son esenciales para combatir el estreñimiento. Por tanto, si padeces dificultad para ir al baño, intenta introducir en tu dieta frutas como peras, manzanas y ciruelas pasas, verduras de hojas verdes, granos enteros, como avena y quinoa, legumbres, como lentejas y frijoles, y frutos secos.
Además, deberás beber mucha agua y otro tipo de líquidos, como caldos y zumos, para facilitar el funcionamiento de la fibra en tu organismo y tratar el estreñimiento, puesto que la deshidratación es muchas veces la causante de este tipo de molestias.
Recuerda que la clave para disfrutar de una buena salud es seguir una dieta rica, equilibrada y variada, así que si no sabes qué comer para el estreñimiento, ¡prueba algunas de las recomendaciones que te acabamos de hacer!
Y, si necesitas ayuda para planificar tu dieta, no tengas miedo de acudir a un profesional en el sector de la nutrición y la salud. Muchas veces, nuestro mayor enemigo es la desinformación, así que busca y pregunta todas las dudas que tengas para poder desarrollar unos hábitos de alimentación sanos y adecuados.
